Si te han practicado o estás en proceso de pasar por una histerectomía total, es muy probable que tengas un millón de dudas rondando por tu cabeza.
Saber a lo que te enfrentas y los retos que tendrás que superar es importante para que te puedas sentir mejor y más segura contigo misma. Una histerectomía acarrea diversas consecuencias, tanto físicas como psíquicas para las que querrás estar preparada.
Antes de comenzar con este post, te recordamos que las recomendaciones que daremos tienen un carácter genérico y son meramente informativas. Es muy importante que sigas las pautas establecidas por tu ginecólogo o el experto sanitario que lleve tu caso y que le des tiempo a tu cuerpo y mente para que se recuperen poco a poco.
Igualmente, las dudas que te puedan surgir deberás consultarlas con un experto, tanto antes de la intervención como después, incluyendo el periodo de recuperación.
Es importante que te mantengas informada sobre qué es la histerectomía total, cómo afectará a tu cuerpo y cómo deberás cuidar de ti misma tras la operación.
Qué es histerectomía total
La histerectomía total es un tipo de histerectomía en la que se extirpa el útero y el cuello del útero. A diferencia de la histerectomía radical, no se quitan los ovarios ni las trompas de Falopio.
También puede darse la necesidad de practicar una histerectomía subtotal, en la cual no se extirpa el cuello del útero. Conservando el cuello uterino se disminuye el riesgo de sufrir dificultades sexuales o problemas al orinar o defecar, consecuencia de los prolapsos tan frecuentes que ocurren tras este tipo de intervención.
Es importante que consultes con tu ginecólogo cuál es el procedimiento que se va a llevar a cabo y repasar todos los motivos por los que es necesario esta intervención quirúrgica en lugar de otro tipo de alternativas.
Causas de una histerectomía total
Miomas o fibromas uterinos
Una de las mayores causas de la histerectomía total es la aparición de alguna patología benigna del útero. Se suele practicar cuando los motivos por los cuales se pasa a extirpar el útero no son cancerosos. En este caso, tanto una histerectomía total como una subtotal suelen ser el procedimiento más común.
Prolapso uterino avanzado
Un prolapso avanzado de útero donde ya sobresale de la vagina de forma continua o intermitente es una causa para proceder a realizar una histerectomía total. A este nivel, el prolapso llega a provocar infecciones y úlceras y dificulta el poder llevar un ritmo de vida normal.
Con la intención de ayudarte a mejorar la salud de tu suelo pélvico y tonificar los músculos del abdomen profundo, algo absolutamente indispensable tras pasar por una histerectomía, desde En Suelo Firme hemos desarrollado nuestro curso online Método Abdomino Pélvico. Siguiendo nuestro curso totalmente online y de acceso inmediato y de por vida, podrás frenar el avance de los síntomas del prolapso, mejorarlos e incluso evitar que este ocurra.
Si quieres saber un poco más sobre el prolapso, sus síntomas y los hábitos o prácticas que lo provocan, échale un vistazo los siguientes vídeos de nuestro canal de YouTube donde Laura Rojas, nuestra fisioterapeuta especializada en suelo pélvico, nos explica todo lo que debemos saber sobre el prolapso.
- Síntomas de prolapso que no deberías ignorar
- ¿Sabes qué es un prolapso? Descubre sus causas y síntomas
Hemorragias anómalas
Estas hemorragias anómalas pueden estar provocadas por una alteración en el ciclo hormonal de la menstruación. El sangrado es irregular o más frecuente y abundante.
Para encontrar el motivo de las hemorragias se procede a realizar una biopsia endometrial y es posible regularla a partir de la administración de hormonas femeninas como estrógenos o progestágeno.
En el caso en el que el tratamiento hormonal no funcione y se detecten células anómalas, se comienza a valorar la posibilidad de realizar una histerectomía.
Cuidados postoperatorios tras una histerectomía total
Recuperarte tras una histerectomía total tomará tiempo, por lo que no debes presionarte, ve poco a poco retomando tu vida y adaptándote a esta nueva versión de ti.
Habla sin miedo con tu ginecólogo para que pueda explicarte los cuidados que debes llevar a cabo y para que sepas de qué forma tu cuerpo y tu mente se van a ver afectados por la operación.
Con carácter general, los cuidados que debes seguir las primeras seis semanas después de la operación serán los siguientes:
- Sentarse es preferible a estar de pie porque se reduce la presión sobre la herida.
- Evitar permanecer tumbada en la misma postura durante largos periodos de tiempo.
- No hacer abdominales ni levantar peso, o hacer sobreesfuerzos físicos en general.
- Evitar conducir.
- Ducharse y no bañarse ni en bañera, ni piscinas, ni en el mar.
- Realizar respiraciones diafragmáticas lentas y profundas.
- Evitar tampones o cualquier otro tipo de dispositivo vaginal.
- Empezar a andar unos cinco minutos al día e ir aumentando poco a poco la duración.
- Asegurarte de que cumples con todas tus horas de sueño.
Recuperación tras una histerectomía
Las seis semanas postoperatorias serán complicadas y tendrás que asegurarte de que estás recibiendo los cuidados adecuados. Aun así, después de estas semanas de recuperación, también tendrás que aprender a adaptarte a tu nuevo cuerpo, al mismo tiempo que vuelves a tu anterior estilo de vida.
El útero es una de las partes más importantes del cuerpo de una mujer. Es el centro de nuestra feminidad y, por lo tanto, nuestra autoestima y seguridad se verán afectadas tras la histerectomía total.
Entre las consecuencias de una histerectomía, se encuentra la imposibilidad de embarazo, la dificultad a la hora de mantener relaciones sexuales o la debilitación del suelo pélvico.
Todos estos factores pueden afectarnos no sólo física, sino también psicológicamente.
No temas. Volver a retomar el contacto contigo misma y con tu cuerpo será solo cuestión de tiempo, no te presiones y ve despacio, paso a paso.
Aquí te dejamos un vídeo sobre la histerectomía y una de las principales consecuencias de esta operación: el prolapso.
Tu vida sexual tras la histerectomía
Generalmente, tras las seis semanas de recuperación ya es posible que realices actividad física o que vuelvas a tener sexo tras la histerectomía.
Sin embargo, antes de hacerlo, deberás pasar por un chequeo médico donde te indiquen si te has recuperado de forma adecuada y si tu cuerpo ya está preparado.
En un periodo de entre unas 6-12 semanas habrás sanado lo suficiente como para volver a mantener relaciones sexuales o realizar ejercicio físico. Aun así, es muy común la aparición de molestias durante las relaciones sexuales debido al acortamiento de la vagina.
Hemos elaborado un post en el que hablamos sobre este tema de forma más amplia, por lo que te recomendamos que le dediques una lectura: Sexo después de una histerectomía? Sí, ¡puede que mejor!
Fortalecer el suelo pélvico
Otra de las consecuencias de la histerectomía es el debilitamiento de los músculos y tejidos del suelo pélvico.
En la siguiente infografía aprenderás un poco más sobre cómo cuidar de la salud de tu suelo pélvico y evitar un prolapso o que este empeore: 10 Reglas de oro para evitar que tu prolapso empeore.
Desde En Suelo Firme te podemos ayudar a fortalecer y tonificar los músculos del suelo pélvico así como todos los elementos implicados en su óptimo funcionamiento (el core y el diafragma entre otros) a través de nuestro curso online Método Abdomino Pélvico.
Por otro lado, es imprescindible que consultes a un especialista en suelo pélvico las diferentes abordajes para garantizar la salud de tu suelo pélvico tras una histerectomía y poder volver poco a poco a la normalidad.
En el siguiente post hablamos más en profundidad de cómo puedes fortalecer tu suelo pélvico: Los mejores ejercicios para fortalecer el suelo pélvico
Si te ha gustado este post y te ha servido de ayuda, compártelo en redes sociales, porque compartir es vivir y la información es poder.
Cuéntanos tu experiencia en comentarios, estaremos encantadas de escucharte.
Madre y profesional que, tras experimentar dos partos traumáticos y enfrentar la violencia obstétrica en ambos, decidió tomar el control de su salud y bienestar. Durante su proceso de recuperación, se sorprendió al descubrir el enorme desconocimiento y los mitos que rodean el suelo pélvico, un tema clave para la salud femenina. Su búsqueda la llevó a la reeducación abdominopélvica, una disciplina completamente desconocida en la sanidad pública española de aquel momento, pero ampliamente cubierta en otros países europeos.
Después de su recuperación física y emocional, se comprometió a ayudar a otras mujeres que, como ella, se sienten desamparadas y desinformadas. Junto a Laura Rojas, fundó En Suelo Firme, un proyecto dedicado a proporcionar información fiable y accesible sobre la salud del suelo pélvico, rompiendo tabúes y ofreciendo soluciones basadas en la evidencia científica. Su objetivo es empoderar a las mujeres para que recuperen su bienestar y calidad de vida.