Hoy en el blog de En Suelo Firme tenemos el honor de contar con la participación de Ana Escudo, fisioterapeuta pelviperineal y doula, a la que agradecemos de corazón habernos regalado su tiempo para llevar a cabo esta entrevista, con la que queremos dar a conocer cuál es el papel de una doula y arrojar algo de luz sobre la polémica suscitada en los últimos meses acerca de sus competencias frente a las de la matrona.

Estamos seguras de que sus respuestas y explicaciones te resultarán más que interesantes. ¡Que lo disfrutes!

Qué son las doulas

Ana Escudo: La doula es una mujer preparada para dar apoyo emocional (sea con palabras, un saber estar, una mirada cómplice) y físico (masaje u otros soportes naturales para sobrellevar el dolor de la mejor forma posible, por ejemplo, durante la dilatación y el parto, escucha activa de la madre y de su pareja) durante el embarazo, el parto, el postparto y la crianza. Nosotras no hacemos ninguna terapia sino que apoyamos de una forma natural los procesos de la mujer y de su familia.

Hay doulas que se han especializado más en acompañar la crianza, duelos perinatales, otras en acompañar procesos de fertilidad, por ejemplo. En general, la doula está para acompañar el proceso completo de la mujer, si ella así lo desea, pero luego están casos más específicos, como los que acabo de comentar.

Qué es una doula y sus funciones durante el embarazo

AE: Estar para la mujer y la familia que se está formando. Escuchar sus incertidumbres, dudas, deseos. Apoyarles en su búsqueda de información sobre dónde parir, formas de crianza, lactancia materna. Apoyar sus decisiones. En nuestra sociedad parece que, una vez que te quedas embarazada, ya no eres dueña de tu cuerpo, siempre hay alguien para decir lo mal que lo estás haciendo o que no tienes ni idea (aún más si eres primeriza). Vas perdiendo fuerzas a ratos y te cuestionas a ti misma, si lo que tú sientes está bien o si los demás son los que tienen la razón sobre lo que te ocurre a ti y a tu cuerpo. La doula es un apoyo para sobrellevar todo eso. Nosotras entendemos que todo lo que la embarazada siente está bien, no la juzgamos. No tenemos derecho sobre el cuerpo de esa mujer y creemos que nadie lo tiene, aparte de la propia mujer, sea sanitario o no.

Qué es una doula de parto

AE: Normalmente sólo quien se ha sentido sola durante su parto, o que conoce a mujeres que se hayan sentido así, entienden la labor de una doula en el parto.

Hay muchas mujeres que sienten que sus partos no fueron como tenían que haber sido. Sienten que no fueron apoyadas ni escuchadas a la hora de decidir sobre sus cuerpos y su salud. La doula viene a dar el apoyo emocional y físico  que la mujer necesita para sobrellevar el dolor, lo que puede evitar que esa sensación de abandono ocurra. Cuidamos que el ambiente de dilatación y parto sean los más adecuados, de acuerdo con el deseo de la mujer. Cuando estás en un ambiente de confianza te centras más fácilmente en ti misma y en tu proceso.

Cómo puede ayudar una doula a la recién estrenada mamá durante el puerperio

AE: En el puerperio pueden surgir distintas necesidades, la más frecuente es con la lactancia y las dudas que surgen con ella. Solemos ayudar con la toma de contacto con el bebé, postura y enganche a la hora de dar el pecho. En general, las madres saben muy bien lo que tienen que hacer, lo único es que no se dan cuenta de ello porque a lo mejor no tienen el apoyo que necesitan en su entorno. Muchas veces sólo necesitan escuchar que lo están haciendo bien, que esa necesidad imperiosa de estar pegada a su cachorro no va a malcriar al bebé, como pueden decir muchos a su alrededor.

Estamos en una sociedad en la cual no se comprende por qué una mujer necesita apoyo emocional en su embarazo, parto y postparto. Con todo el cambio hormonal y la carga emocional que conllevan esos procesos. Se trata de una sociedad donde la mujer embarazada, la madre y los niños no tienen lugar, en la que se les exige andar al ritmo de los demás, cuando tienen sus propios ritmos.

¿Qué NO hace una doula?

AE: La doula NO hace muchas cosas. Para empezar, no es personal sanitario con lo cual, no hace ninguna intervención sanitaria. No toma decisiones por la familia ni por el personal sanitario. No asiste partos, acompaña a la mujer. Es muy importante entender eso, acompañar emocional y físicamente no es poner una vía ni decidir si una mujer debe ponerse la epidural o no.

No ocupamos el lugar de la matrona o ginecólogo ni tampoco el papel del padre. Somos mujeres que creemos en la capacidad que tiene otra mujer de parir.

No estamos tan vinculadas emocionalmente con la mujer como el padre ni tenemos una relación tan distante como el personal sanitario que la acaba de conocer, con lo cual podemos mediar mejor determinadas situaciones sin la responsabilidad que conlleva ser matrona y sin la carga emocional que conlleva ser el compañero sentimental de esa mujer.

Apoyamos a la familia, el padre también tiene sus necesidades, no nos olvidemos de eso.

¿Cuál es la situación de las doulas en España? ¿Hay diferencias respecto a nuestros países vecinos?

AE: La doula es una figura que sólo ahora se empieza a conocer mejor tanto por los profesionales sanitarios como por parte de las usuarias. En otros países de Europa (y en algunos países de América, como los Estados Unidos) la doula está reconocida como una figura que puede ayudar a disminuir las intervenciones médicas en los partos y fomentar el vínculo madre-bebé, lo que puede ayudar mucho a la hora de la lactancia materna, por ejemplo. De hecho, hay estudios que comprueban esas ventajas.

En algunos países, como puede ser Brasil por ejemplo, la doula ya está incluida desde hace algunos años como ocupación. En otros, la doula trabaja junto al personal sanitario, son complementarios, incluso hay matronas que creen que la doula les ahorra bastante tiempo y trabajo.

¿Qué tipo de familia contrata una doula?

AE: No hay un perfil “hippie” como muchos piensan. Suelen ser familias conscientes del estado actual del parto en España y que buscan una forma de nacimiento lo más respetuosa y segura posible, mujeres conscientes de que parir puede doler (ojo, dolor no es sinónimo de sufrimiento) pero que sus cuerpos están preparados para ello. Esta actitud no tiene que ver con clase social, tiene que ver con el empoderamiento de una misma.

De tu experiencia como doula, ¿cuál ha sido el momento más bonito que has vivido?

AE: El momento más bonito se multiplica por todas las mujeres a las que he acompañado. Es ese momento cuando la mujer coge a su bebé en brazos y lo mira por primera vez. Es una mirada de reconocimiento, de alegría y realización que te llena. Una mujer pariendo en un ambiente de respeto y en libertad es la imagen más potente que he visto nunca. No hay nada más bello.

¿Y el momento más duro que has experimentado?

AE: Afortunadamente nunca he presenciado ningún parto instrumental, ni de violencia obstétrica pero la violencia obstétrica es un hecho y ocurre en muchos hospitales. La mujer está sola a la hora de parir. No hay una matrona por parto, es imposible que una matrona se pueda vincular con tantas mujeres como atiende en 24 horas.

La atención al parto necesita un cambio, una renovación de conocimientos y de conceptos. Entrar en una nueva Medicina, donde se escuchen las necesidades de cada mujer, que haya tiempo para escucharlas y que esa mujer no sea inducida porque ese es el protocolo o porque se acerca un festivo o un cambio de guardia. Hay cosas que se están haciendo mal y hace falta mucha humildad para reconocerlo, para eso hace falta quitarse la bata blanca y mirar a la usuaria como un igual. No hay nada malo en asumir y rectificar las equivocaciones.

Qué es una doula y sus funciones

«Ojalá pudiésemos ir a parir a un hospital y que te respetasen en todo momento pero desafortunadamente los protocolos son, en muchos casos, los protagonistas de los partos, pasando por encima de las necesidades de las mujeres». (Ana Escudo, en el blog de En Suelo Firme).

¿Qué te llevó a formarte como doula? ¿Cuál ha sido el camino recorrido hasta conseguirlo?

AE: Por un deseo profundo de que ninguna mujer recuerde el nacimiento de su bebé como el peor día de su vida. Supongo que también por vocación. Ser doula no te va a hacer rica, trabajas cualquier día del año, festivo o no. Lo haces con una vocación tremenda o no tiene sentido. Yo me formé en el año 2010 pero como dice el obstetra Michel Odent “una doula se hace en cada acompañamiento”, es donde realmente aprendes.

¿Cuáles son las ventajas, desde tu punto de vista, de contar con una matrona y una doula trabajando en equipo durante el parto?

AE: Para mí, todas. Una matrona que entiende la labor de la doula y una doula que entiende la labor de la matrona hacen un equipo a la perfección y la mujer lo siente. Siente que tiene a su alrededor personas que están a su servicio y al de su familia y no peleándose entre sí.

El parto es un acontecimiento guiado por las hormonas, la mujer está sensible y susceptible a todo lo que la rodea. ¿Nunca has estado al lado de una persona nerviosa y tú, que en un principio estabas tranquila, te has ido poniendo nerviosa también? Eso es porque las hormonas «se pegan», por eso en el parto tiene que haber un ambiente de respeto y confianza.

Nadie pare (de una forma fisiológica, sin intervenciones) en un ambiente hostil, de ahí que muchos partos se tuerzan. No es que no hayas sabido parir sino que algo te ha asustado, alguien te ha tratado de una manera inadecuada y el proceso se ha cortado. Cuando matrona y doula trabajan juntas desde el respeto todo funciona mejor.

Yo sólo acompaño partos en un hospital de la Comunidad de Madrid, es el único que acepta doulas. Ahí me reciben con una sonrisa, respetan mi trabajo porque saben que estoy ahí por deseo de la mujer. Hay diálogo, no me meto en su trabajo y ellas respetan el mío. Para mí, donde esté una buena matrona, respetuosa, que trabaje en base a la fisiología del parto, habrá más autonomía para la mujer.

¿Qué le aconsejarías, como mujer y como doula, a una mujer embarazada que estuviera leyendo esta entrevista?

AE: Infórmate. Ojalá pudiésemos ir a parir a un hospital y que te respetasen en todo momento pero desafortunadamente los protocolos son, en muchos casos, los protagonistas de los partos, pasando por encima de las necesidades de las mujeres. Infórmate sobre tus derechos como usuaria y los derechos de tu bebé, sobre los protocolos que utilizan en el hospital de tu elección. No te conformes con “voy a parir ahí porque me toca” o “mi ginecólogo atiende en ese hospital” o “está cerca de mi casa”. Es la llegada de tu bebé al mundo, debería ser un gran día para él y para ti.

¿Y como fisioterapeuta, especialista en suelo pélvico, qué le aconsejarías a la futura madre antes, durante y tras el parto?

AE: Como sanitaria entiendo que algunas mujeres deleguen su salud y sus procesos a otros profesionales y que así se sientan más seguras. Sólo me gustaría recordar que, cuanto más activa y dueña de tu proceso de parto estés, más fisiológico será el parto y más protegido estará tu periné.

Ponemos nuestra salud y nuestros cuerpos en manos de otros y sufrimos el síndrome de la bata blanca hasta el punto de pasar por encima de nuestros propios instintos y dejar que otros decidan sobre nuestros cuerpos.

Sobre el postparto, me gustaría decir que tener relaciones sexuales dolorosas tras el parto no es normal, que la gotita de orina que pierdas no es normal (por más que tu grupo de amigas también la pierda), que te duela una cicatriz, sea de una episiotomía o de una cesárea no es normal. No es consecuencia del parto, no por lo menos de un parto fisiológico. No aceptes como respuesta “has parido ¿qué querías?”. No te conformes.

¿Has contado en alguno de tus partos con el acompañamiento de una doula?

AE: No soy madre todavía pero ya tengo fichada la matrona a la que contrataría para asistir mi parto y las personas que me gustaría que estuviesen a mi lado ese día, lo único es que ellas todavía no lo saben, jeje. Es fundamental sentirse acompañada en un momento tan importante si así lo desea una.

Fisioterapeutas en el paritorio

En Suelo Firme: Además de doula eres fisioterapeuta pelviperineal. En algunos hospitales de países como Bélgica, los fisios entran a paritorio, ayudando a la mujer en aspectos como la elección de posturas que favorezcan las distintas fases del parto. ¿Cuál es tu opinión al respecto? Cuando acompañas partos, ¿también les ofreces apoyo a las mujeres en este sentido?

AE: Sí, efectivamente. ¡Bélgica es otro mundo! Busco separar bien mi trabajo como fisioterapeuta y como doula, dado que una es sanitaria y la otra no. Digo que la fisioterapeuta siempre va acompañada de la doula, aunque al revés intento no mezclarlo pero por supuesto pienso que favorecer posturas que alivien el dolor y hacer masajes a la madre son parte de las labores de una doula, aunque muchas compañeras de profesión piensen lo contrario, también es cierto que mis influencias como doula son más americanas, no hablo por el colectivo en general de España.

Me considero una herramienta para sobrellevar el dolor al servicio de la mujer, sea como doula, sea como fisioterapeuta.

Estar bien informada: primer paso contra la violencia obstétrica

ESF: Estamos llegando al final, Ana. Nos gustaría que abordaras en este tiempo cualquier aspecto que consideres importante y no hayamos tocado hasta ahora.

AE: Me gustaría simplemente enfatizar que cada mujer se informe a la hora de elegir donde dar a luz. Deberíamos poder ir a un hospital y tener la plena confianza de que ahí trabajarán con la evidencia científica actualizada bajo el brazo pero infelizmente no es así. Seguimos con unos índices de violencia obstétrica elevadísimos así que pediría que cada mujer se adueñase de sus procesos vitales y se informase. La asociación El Parto es Nuestro lleva años trabajando por los derechos reproductivos de la mujer; os invitaría a que os pasarais por su página web donde encontraréis la evidencia científica más actualizada en lo que al parto se refiere.

ESF: Muchísimas gracias de nuevo por tu tiempo, Ana. Te esperamos pronto en el Blog, colaborando como autora invitada para disfrute de nuestros lectores.

AE: Gracias a vosotras por abrir este espacio.

[box type=»info» size=»large» style=»rounded» border=»full»]Ana Escudo en el blog de En Suelo FirmeAna Escudo es fisioterapeuta obstétrica y ginecológica y doula. Su formación y trabajo están volcados totalmente hacia la mujer y la maternidad.

Trabaja a domicilio en toda la Comunidad de Madrid y pasa consulta en Torrelodones y Pozuelo.

Como doula acompaña a mujeres en toda la Comunidad de Madrid y a mujeres de otras comunidades que vengan a dar a luz en nuestra comunidad.

La puedes encontrar en su página web aquí: NaceNatura y en su perfil de Facebook.

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Escrito por: Laura Rojas (Fisioterapeuta En Suelo Firme)

Fisioterapeuta especializada en suelo pélvico y licenciada en Periodismo por la UCM, combina su labor asistencial como fisioterapeuta pelviperineal con su labor divulgativa a través de En Suelo Firme. Su formación y experiencia en el ámbito de la comunicación se unen a una fuerte vocación de servicio y a un inagotable interés por la salud integral de la mujer, desarrollada en el ámbito de la fisioterapia obstétrica y uroginecológica, valorando y tratando los trastornos funcionales del periné, que pueden afectar a nivel urológico, coloproctológico, ginecológico y sexológico, con el objetivo de mejorar la calidad de vida de la mujer y el hombre en las distintas fases de su ciclo vital.

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