Aparatos electroestimuladores del suelo pélvico como Neurotrac Pelvitone que, mediante una sonda, vaginal o anal, o unos electrodos, aplican una corriente eléctrica no dolorosa y que provoca la contracción y fortalecimiento de los músculos del suelo pélvico o, con otros parámetros, la relajación de esta musculatura. La electroestimulación es un tratamiento reconocido por su alta eficacia en los casos de incontinencia urinaria y anal. Despierta los músculos del suelo pélvico y les ayuda a mantener su contracción. En aquellas personas que tienen muy debilitada esta zona, la electroestimulación es casi la única manera de que consigan contraer el suelo pélvico. Mejora el flujo de sangre que nutre y recupera el músculo, multiplicándolo en cada contracción generada por el aparato. Ayuda a localizar, contraer y reforzar el periné y los esfínteres mejorando la incontinencia urinaria y fecal con un alto grado de éxito. Puede resultar útil en caso de vejigas hiperactivas, ayudando a que el músculo que nos avisa de que vayamos al baño sólo se contraiga en caso de que nuestra vejiga se encuentre suficientemente llena. En otras ocasiones se utiliza para calmar zonas dolorosas o hipersensibles del área vulvar y vaginal, tales como la cicatriz de la episiotomía.